La Comunicación Sostenible se centra en el desarrollo humano ético y tiene como objetivo facilitar y promover la responsabilidad y la educación.
Para ello se basa en la selección y uso de unos canales, medios o herramientas de comunicación que al mismo tiempo que contribuyen a la consecución de dicho objetivo, no comprometen el bienestar de las generaciones actuales y futuras.
La Comunicación Sostenible es una corriente de pensamiento y de trabajo que se está impulsando desde hace unos años y que está ganando terreno en diversos ámbitos para mejorar la educación ambiental y social. Se trata, en definitiva, de una forma de concebir y hacer las cosas que tiene en cuenta el impacto que nuestras acciones pueden tener en el medio ambiente y en la sociedad, y que busca minimizar ese impacto negativo.
La Comunicación responsable se centra, por tanto, en el diseño, la selección y el uso de herramientas y canales de comunicación que contribuyan a la consecución de un Desarrollo Humano Sostenible. Esto significa que la Comunicación Sostenible debe ser capaz de contribuir en el desarrollo sostenible y a la solución de los problemas ambientales y sociales, y no a su agravamiento.
En este sentido, la Comunicación ética debe ser responsable, ética, sensible al contexto, transparente, participativa, inclusiva, sensible a las diferencias culturales y sociales, y orientada al futuro.